Los ideales de imagen corporal han estado presentes desde hace mucho tiempo. Presentes en los medios de comunicación, en las redes sociales e incluso en las conversaciones cotidianas.
Comentarle a alguien lo bien que se ve por haber adelgazado, subir un video que fomente adelgazar para verse más lindo/a, decir que luego de comer mucho vas a “salir rodando del lugar”. Todo este tipo de comentarios, críticas y chistes en los que el centro de atención es el físico y la imagen corporal, y los cuales son aceptados socialmente en todo el mundo, son parte de lo que se denomina el “Fat Talk”.
La Dra. María Estela Caccavo de Estefan, Directora Médica de la Fundación CETAI, organización sin fines de lucro cuya misión es “promover la salud y el bienestar psíquico, social y emocional de niños, adolescentes, jóvenes y familias”, nos comenta en esta nota sobre la importancia de la eliminación del discurso “Fat Talk” como uno de los elementos de prevención del desarrollo de posibles trastornos alimentarios en las personas.
El “Fat Talk” y los trastornos alimentarios
Aquellas personas que presentan algún tipo de vulnerabilidad como la falta de autoestima, sensación de crítica al cuerpo, influencia social negativa o conflictos familiares desde los comienzos de la niñez, pueden verse afectadas gravemente frente al discurso “Fat Talk”, el cual genera un daño invisible y puede contribuir a que estas personas terminen desarrollando trastornos alimentarios severos.
“Durante muchos años, las enfermedades relacionadas a la alimentación se han visto como caprichos, no se las consideraban como una enfermedad real, ya que pareciese que fueran algún tipo de moda, que se contagian”, nos comenta la Dra. Estefan. “Sin embargo, realmente son enfermedades que afectan la mente, y es ésta la que impide que se dé una alimentación adecuada. Además, no sólo deterioran la salud del cuerpo, sino que desencadenan otros problemas como la depresión, crisis de angustia, ansiedad extrema o cuadros fóbicos“.
Prevención y contención como prioridad
Si bien la fundación CETAI trabaja con personas que ya poseen trastornos alimentarios, la Dra. Estefan nos destaca la importancia de hablar de la prevención de las enfermedades más que de las enfermedades en sí: “tratando e informando sobre la prevención lo antes posible, se puede ayudar más directamente a evitar el desarrollo una enfermedad”.
Es por esto que una de las principales misiones de la fundación es brindar capacitaciones que promuevan la “Alimentación emocional” y el “No más Fat Talk” incluyendo toda esta difusión idealista que se da en las redes sociales y en la sociedad en general respecto a los cuerpos de las personas. Éstas están dirigidas tanto a grupos escolares como a grupos de adolescentes, padres, docentes, e incluso hasta para las reinas de la Vendimia.
La acción temprana puede ser primordial a la hora de prevenir o curar un trastorno alimentario que de otro modo podría provocar consecuencias graves para la persona afectada. La educación, la concientización respecto a temas alimentarios y la contención familiar y social son fundamentales para que los niños y luego jóvenes puedan sentirse seguros de sí mismos, pudiendo desarrollar una vida plena y hábitos muy saludables.