La enfermería colabora en mejorar la calidad de vida de los individuos, las familias y las comunidades ya sea como integrante del equipo de salud (a través de tareas dependientes) o bien actuando en forma individual, llevando a cabo tareas y aportes a la salud de las personas (dispensando cuidados en forma independiente). Se ejerce de manera profesional, con título técnico, de grado o posgrado. Y aporta no sólo al cuidado biológico del paciente, sino también al cuidado psicoemocional, social y espiritual.
Sin embargo, históricamente se la ha relegado debido al modo en que comenzó a funcionar y en estos tiempos padece algunas dificultades. Según contó a Diario Salud el licenciado en Enfermería Claudio Marcelo Ledda (Mat. 6623), “hace algunos siglos la enfermería constituía una labor de ayuda y acompañamiento a los enfermos, generalmente realizada por mujeres, quienes dependían totalmente de las órdenes de un médico. Con el tiempo, quienes la ejercían comenzaron a instruirse y a nutrirse de conocimientos de la medicina, y también se conformó (a través de la investigación), un cuerpo de conocimientos propios que permitió, de a poco, comenzar a ocupar un lugar dentro del equipo de salud. Hoy en día, en algunos ámbitos, la enfermería está siendo más reconocida, pero todavía no todo lo que corresponde”.
En algunos casos, de acuerdo al profesional, se mantiene todavía un modelo médico hegemónico. Sin embargo, gracias al cambio de paradigmas en donde ya no hay una figura central sino un equipo de especialistas al cuidado de la salud, esta situación está siendo superada. “Hoy podemos ver en Argentina, incluso en Mendoza, Instituciones de salud donde la Dirección General es ejercida por algún enfermero o enfermera, y eso es realmente un orgullo para la profesión”, manifestó Ledda.
Sucede que son los enfermeros los primeros profesionales en recibir a los pacientes en un hospital y su papel puede ser determinante a la hora del diagnóstico, tratamiento, internación y recuperación de los enfermos. Por ello, según la Fundación Argentina para el Progreso de la Enfermería, “se hace necesario contribuir a la generación de recursos humanos en Enfermería, desde un nivel teórico-científico, con dominio metodológico, con una actitud ética consecuente con los tiempos que corren y con una capacidad profesional capaz de ser integrada en una práctica social generadora de cambios”.
En ese sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) han establecido como meta que haya al menos 1 enfermero por cada médico, y han declarado al año 2020 como el año de la enfermería: “Annette Kennedy, presidenta del consejo ejecutivo de la OMS, ha destacado que esta iniciativa supondrá una herramienta para dar relevancia a la necesidad de tener personal de enfermería adecuadamente formado y, por otro lado, para formular otras estrategias de retención y de contratación que se traduzcan en la supresión de los impedimentos al desarrollo profesional. Por su parte, Howard Catton, director de Enfermería, Políticas y Programas del CIE, ha querido poner de manifiesto que esta campaña constituye una gran oportunidad de resaltar el papel de la enfermería en la salud, tanto en el presente como en el pasado, y, asimismo, para impulsar su papel en el ámbito político”, destacan desde el Consejo Internacional de Enfermería.
Los datos actuales de ambas organizaciones arrojan hasta ahora a la enfermería como un recurso escaso en Sudamérica, indicando que Argentina posee una de las tasas más bajas de enfermeros por habitante (hay menos de 5 enfermeros cada 10.000 habitantes). En el resto de los países muestra que: Chile tiene 22 enfermeros cada 10.000 habitantes; Uruguay, 18,9; Paraguay, 14,6; Brasil, 7,1 y Bolivia, 5,1. Comparativamente con países como Estados Unidos y Canadá la diferencia es muy marcada: 111,4 enfermeros cada 10.000 habitantes en el primer territorio y 106,4 cada 10.000 en Canadá.
La dificultad a la que se enfrenta con más fuerza la disciplina, según explica Ledda, es el bajo reconocimiento económico que posee, por el que se da un alto porcentaje de enfermeros con múltiples empleos para lograr un buen pasar. “Esto puede redundar en una disminución de la calidad de la prestación que brinda ese agente que descansa muy poco y va de un hospital a otro”, sostuvo.
Los enfermeros en los equipos médicos
Sobre el rol de los enfermeros dentro de un equipo hospitalario, el licenciado detalló las tareas dependientes e independientes del resto de los profesionales y la importancia de las mismas: “En cuanto a las tareas dependientes de otros profesionales, los enfermeros llevan a cabo funciones que estos indican, como tratamientos medicamentosos; monitoreo de constantes vitales y numerosas subtareas que se desprenden de éstas. Y, en cuanto a las tareas independientes se encuentran la satisfacción de las necesidades básicas, por ejemplo aplicando los conceptos de la Pirámide de Maslow y otras teorías. De allí surgen tareas relacionadas con: satisfacer las necesidades de oxigenación; alimento; hidratación; abrigo; higiene y confort; cuidados de la piel; educación; etcétera, siempre enfocándose a lograr, en el menor tiempo posible, la mayor independencia de la persona”.
¿A dónde estudiar la carrera de enfermería en Mendoza?
Bajo la búsqueda de puesta en valor de la carrera, en Mendoza es la Universidad Nacional de Cuyo la principal institución con el foco puesto en la carrera de enfermería, que la propone dentro de una amplia oferta a estudiar: “La Escuela de Enfermería de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Cuyo tiene por objetivos: propiciar, a través de la formación de calidad en enfermería, el mantenimiento y la mejora del nivel de salud de la población; formar profesionales de enfermería comprometidos con la realidad social, nacional y regional, capaces de identificar e interpretar problemas de salud en general y de enfermería en particular, a fin de brindar un servicio de calidad, con alto contenido ético y moral, acorde a las necesidades de nuestra comunidad; ofrecer formación universitaria de pre-grado, acorde a las necesidades de recurso humano de la región, el país y la provincia y promover en los graduados un espíritu investigativo y de aprendizaje continuo, que tienda al perfeccionamiento y la actualización de conocimientos personal y profesional y al desarrollo de la enfermería como disciplina profesional”.
Funcionando en el edificio de la Facultad de Ciencias Médicas, la Escuela de Enfermeros de la UnCuyo promete a futuros licenciados poder trabajar administrando servicios de enfermería hospitalarios y comunitarios y ejerciendo funciones de conducción y gestión en instituciones, docencia e investigación. Además, abre una vertiente al aprendizaje para ser formadores profesionales de enfermería y de la salud; a generar programas de educación continua, así como también a participar en equipos interdisciplinarios.
El programa es bastante amplio y tiene una duración curricular de 5 años. Si estás interesado en el plan, seguí el siguiente link http://www.uncuyo.edu.ar/estudios/carrera/licenciatura-en-enfermeria_2559.