El uso inapropiado de los fármacos es una realidad que desde hace tiempo quiere ser combatida. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de la mitad de los medicamentos se prescriben, dispensan o venden de manera inapropiada. Además, el 50% de los pacientes no toma sus medicamentos correctamente.
En la Argentina, tanto el Ministerio de Salud de la Nación como la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica) se han encargado de velar por la seguridad y de regular los medicamentos, aunque no han podido con la totalidad de la venta ilegal, por una parte, y con el consumo inadecuado, por otra.
Es por ello que la autoridad provincia de salud promueve el consumo responsable de los fármacos. En primer lugar, pidiendo a la población que sólo compre medicamentos en las farmacias, ya que la venta en internet o en kioscos, además de otras vías, está prohibida y es muy riesgosa para la salud. Seguidamente, explicando cuáles son las formas más comunes de mal usar los remedios, como la polifarmacia (demasiados medicamentos por paciente), la incorrecta utilización de antibióticos, la falta de prescripción de acuerdo con las guías clínicas, la autoprescripción y la falta de adherencia a los tratamientos.
El uso racional de los medicamentos depende tanto de las personas que lo adquieren como de las que los recetan, ya que para administrarse correctamente un fármaco es indispensable la prescripción de especialistas certificados, quienes son los únicos que pueden indicar el tipo, tiempo y manera de utilizarlos.
¿Cómo usar correctamente los medicamentos?
Desde el Departamento de Farmacia del Ministerio de Salud brindaron algunas recomendaciones:
- El medicamento es un medio para curar o aliviar los síntomas de una enfermedad, que debe ser prescrito por un médico o aconsejado por un farmacéutico en el caso de los que no requieren receta médica.
- Los medicamentos prescritos por el médico están ajustados a las necesidades individuales según la enfermedad.
- Respetar siempre las instrucciones sobre cómo tomarlos y la duración del tratamiento.
- Evitar la automedicación, es perjudicial si se refiere a medicamentos que requieren receta médica.
- Tener precaución con el uso de las plantas medicinales y productos herbarios.
- Si se sospecha que un medicamento está provocando un efecto adverso, comunicarlo inmediatamente al médico o farmacéutico. No abandonar un tratamiento sin la consulta previa al médico.
- Antes de tomar cualquier medicamento, preguntar siempre al médico o farmacéutico.
- Revisar la fecha de vencimiento de los medicamentos antes de tomarlos.
- Seguir las instrucciones de conservación, no almacenar los medicamentos en cocina o baños. Mantenerlos lejos del calor, luz del sol o humedad.
- Conservar los medicamentos en lugar seguro, adecuado y fuera del alcance de los niños.
- No acumular medicamentos que no se necesitan y no guardar medicamentos caducados.
- Adquirirlos sólo en las farmacias y servicios de farmacia. Tomar medicamentos comprados por internet puede resultar perjudicial para la salud.
- No comprar medicamentos en lugares no habilitados por la autoridad sanitaria, como kioscos, puestos ambulantes o en la calle, ya que se corre el riesgo de adquirir medicamentos sin la adecuada conservación, falsificados, adulterados o robados.
- Usar los medicamentos con responsabilidad.
Además, desde el propio Ministerio advirtieron sobre las consecuencias de la autoprescripción:
- Ocultar síntomas y demorar la posibilidad de un tratamiento adecuado.
- Anular efectos de otros medicamentos.
- Producir efectos adversos.
- Generar resistencias (es decir, que no vuelvan a hacer efecto esos medicamentos).
También es importante tener en cuenta
- Lavarse las manos antes de manipular los medicamentos.
- Leer las indicaciones: cada medicamento tiene condiciones particulares de uso y conservación que vienen detalladas en la caja y en el prospecto.
- Respetar la dosis, los horarios de toma y el tiempo de tratamiento según lo indicado, sin interrumpirlo incluso sintiéndose mejor.
- Mantener los medicamentos fuera del alcance de niños y niñas.
- Tener siempre a mano el teléfono del centro médico o de toxicología.
Fuente: Prensa Mendoza y Ministerio de Salud de la Nación.