Los números fueron arrojados por el Ministerio de Salud de la Provincia y no son nada alegres. Y es que, por año, el cáncer de cuello de útero se cobra la vida de 70 mendocinas, según dijeron desde el organismo público. Consultamos también al Jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Santa Isabel de Hungría (HSIH), doctor Ernesto Olcese (Mat. 5624), la educación alrededor de la enfermedad podría reducir grandemente este padecer.
“Con los estudios regulares de Papanicolau y Colposcopía, además del test de VPH, la prevención y/o detección temprana salvaría muchas vidas”, manifestó el ginecólogo.
El cáncer de cérvix ocupa el segundo lugar detrás del cáncer de mama, siendo ambos los que más afectan a la población femenina. Por ello, conforme a los especialistas, conocer la enfermedad y tomar conciencia de ella es de suma importancia: “El cáncer de cuello uterino es una transformación maligna de las células del cuello del útero. Esas células tienen una capacidad de crecer y de ir destruyendo parte del cuello. Este tipo de cáncer se produce por un virus, que es el del papiloma humano (HPV). El HPV tiene las características de meterse en las células y cambiar su aspecto y comportamiento. Entonces, esas células pierden la capacidad de ser reguladas por el propio organismo, empiezan a proliferar y ahí está la posibilidad de producirse el cáncer”, explicó Olcese.
El virus del papiloma humano ingresa, en la mayor parte de los casos, por transmisión sexual. Sin embargo, existen otras causas menos recurrentes, detalladas por el doctor: “Puede producirse por transmisiones congénitas (es decir, la localización del virus en el canal del parto podría llegar infectar al bebé), o a través de elementos que estén contaminados por el virus y que suelen formar parte de los juegos sexuales”.
Conforme al jefe del servicio de ginecología del HSIH, el HPV es asintomático, por lo que si una mujer no se realiza controles periódicos puede desarrollar durante años al tumor: “No deben evitarse los controles, ni aunque parezca que está sana”.
Factores de riesgo de cáncer de cuello de útero:
- Muchas parejas sexuales. Cuantas más parejas sexuales tengas (y cuantas más parejas sexuales tenga tu pareja), mayores serán las probabilidades de adquirir el virus del papiloma humano.
- Relaciones sexuales a temprana edad. Tener relaciones sexuales a temprana edad aumenta el riesgo de adquirir el virus del papiloma humano.
- Otras infecciones de transmisión sexual. Tener otras infecciones de transmisión sexual (como clamidia, gonorrea, sífilis y VIH/SIDA) aumenta el riesgo de adquirir el virus del papiloma humano.
- Sistema inmunitario débil. Las probabilidades de desarrollar cáncer de cuello uterino pueden ser mayores si se posee otra enfermedad que debilita el sistema inmunitario y se tiene el virus del papiloma humano.
- Tabaquismo. El tabaquismo está asociado con el carcinoma de células escamosas.
Prevención: cómo reducir el riesgo de padecer cáncer de cuello de útero:
- Vacunarse contra el virus del papiloma humano (VPH). La vacuna está disponible para niñas y mujeres de 9 a 26 años. La vacuna es más eficaz si se administra a las niñas antes de ser sexualmente activas.
- Realizar exámenes de Papanicolaou. Los exámenes de Papanicolaou pueden detectar afecciones precancerosas del cuello uterino, a fin de controlarlas o tratarlas para prevenir el cáncer de cuello uterino. Se recomiendan que las mujeres comiencen a hacerse exámenes de Papanicolaou de rutina a partir de los 21 años y repetirlos con frecuencia anual, según prescripción de su médico tratante. .
- Practicar el sexo seguro. Usar preservativos, tener menos parejas sexuales y retrasar el inicio de las relaciones sexuales puede reducir el riesgo de cáncer de cuello uterino.
- No fumar.
Fuentes: Mayo Clinic