El 31 de mayo de cada año, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y sus asociados, promueven y celebran el día mundial del no fumador, dedicado a resaltar los riesgos para la salud vinculados al consumo del tabaco, promoviendo políticas eficaces para reducir este hábito.
Este año, el eje de la promoción pasa por el impacto que tiene el consumo de cigarrillos en la salud cardiovascular de las personas en todo el mundo, ya que el consumo de tabaco es un factor de riesgo importante para el desarrollo de la enfermedad coronaria, accidente cerebrovascular y la enfermedad vascular periférica.
A pesar de los devastadores daños del tabaco para la salud cardíaca, hay poco conocimiento general de que el tabaco es una de las principales causas de enfermedades cardiovasculares.
A propósito del tema, Diario Salud, hablo con el Dr. David Gatica, médico neumonólogo del Hospital Santa Isabel de Hungría.
-¿Cuál es el riesgo de ser fumador?
-El riesgo de ser fumador se basa fundamentalmente en patologías cardiovasculares (hipertensión arterial, infarto de miocardio); neurológicas: accidentes cerebrovasculares; respiratorias: mayor riesgo de infecciones, neumonías, EPOC; y oncológicas: cáncer de pulmón, de vías urinarias, boca, entre otras. Se estima que de tres fumadores dos van a presentar alguna patología relacionada con el tabaquismo.
-¿Es alta o baja la incidencia en Mendoza de enfermedades por tabaquismo?
– En Mendoza fuma aproximadamente entre el 25-30% de la población. Si bien esta tendencia va en descenso sigue siendo muy alta, por lo cual la cantidad de patologías que genera son muchas.
– ¿Cómo se trabaja en Mendoza con pacientes fumadores que quieren dejar de serlo?
– En Mendoza existe tratamiento para quien desea dejar de fumar. Los médicos neumonólogos pueden tratar esta adicción a la nicotina, que es el tabaquismo tanto a nivel público como el privado.
El tratamiento consiste en dos pilares, por un lado, el tratamiento cognitivo conductal, donde enseñamos al paciente a cambiar e ir reemplazando los desencadenantes o estímulos que dan ganas de fumar. Por ejemplo muchos pacientes asocian el café con el cigarrillo. En ese momento que están dejando de fumar le decimos que reemplace el café por un té o yogurt. Algo que ellos no relacionen con el acto de fumar.
En cuanto al tratamiento farmacológico existen actualmente tres medicamentos, la terapia de reemplazo micotínico (parches, chicles, caramelos o spray nasal), bupropión y vareniclina. Todos son muy efectivos pero tenemos que saber cómo tomarlo y cuáles serían los más beneficiosos en base a las patologías previas del paciente.
– ¿Qué es la EPOC?
– EPOC, corresponde a las siglas de Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica. Esta patología causa dificultad para respirar, sensación de ahogo o falta de aire. Además puede presentar tos o flema. El principal factor de riesgo es el humo del cigarrillo, por lo cual el humo del cigarrillo de otras personas (tabaquismo pasivo) también afecta la salud. Otro mecanismo es el humo en combustión Biomasa (Leña-carbón) para calefaccionar o cocinar.
Esta enfermedad es previsible y tratable. Se hace el diagnostico mediante un examen físico, radiografía de tórax y espirometría.
– ¿En esta época por bronquitis, neumonía se agravan los casos de EPOC?
– La EPOC puede presentar agudizaciones, para entenderlo mejor, el paciente presenta más tos, flema y/o falta de aire. Esto puede ser desencadenado por distintos factores, por ejemplo, humo, cambios de temperatura, época invernal o infecciones.
Por lo cual la recomendación sería en primer lugar, no fumar, evitar estar expuestos a otros humos ambientales, cambios bruscos de temperatura y colocar la vacuna de la gripe anualmente y la vacuna antineumococo.
En caso de presentar una reagudización existe tratamiento con antibióticos y broncodilatadores que deben ser evaluados en cada caso. A modo de conclusión lo mejor que podemos hacer por nuestra salud es no fumar. Si es fumador sepa que existe tratamiento para dejar y son efectivos.
– ¿Cómo mejora la vida de una persona al dejar de fumar?
– La persona que deja de fumar nota los cambios rápidamente, por ejemplo a la hora que deja de fumar tanto la presión arterial como la frecuencia cardíaca disminuye. Si este cambio positivo de haber dejado de fumar persiste en el tiempo la persona recupera el olfato, la piel se ve más sana, hay menor riesgo de impotencia sexual, y la posibilidad de eventos cardiovasculares disminuye al igual que el riesgo de EPOC y cáncer de pulmón.
El Dr. Gatica cuenta que son necesarios 10 años de cesación tabáquica para que el riesgo se iguale con la población general.
En este Día Mundial Sin Tabaco, lo que podemos decirte es que no fumar, o dejar de fumar, es un hábito de vida saludable que ayuda no sólo a que uno lleve una vida más sana, sino que todos alrededor lo hagan también.