La dermatitis atópica es una de las principales patologías dermatológicas que afecta a cerca del 10 % de los niños. La piel se mancha y produce picazón, con posibles lesiones por rascado así como molestias a la hora de conciliar el sueño, entre las principales características.
Valeria García Llaver, dermatóloga (mat. 9509) de Dherma Life de Ciudad y del Instituto Médico Infantil de Rivadavia, explicó que en la mayoría de los niños que la padece esta patología aparece antes de los primeros siete años de vida y que no es común que haya solo un brote de manera aislada. Así, una vez que se da la enfermedad, por lo general continúa durante algunos años con altas y bajas.
Si bien no implica gravedad en líneas generales, sí es cierto que mientras menos edad, la dermatitis puede ser más compleja debido a que la piel no posee aún la madurez suficiente. Con el tiempo, los síntomas suelen aliviarse hasta, en muchos casos, desaparecer. “El 20 % de los niños que manifestaron la enfermedad termina siendo atópico”, señaló la profesional.
Esta dermatitis no es otra cosa que una alergia de piel, un proceso inflamatorio que puede aparecer a partir de diversos alérgenos como jabones o telas. Otras veces, los niños tienen padres alérgicos y, en ocasiones, las marcas de la piel se asocian a enfermedades respiratorias. Se suelen ver placas o manchas rugosas, ásperas o resecas, con la picazón siempre asociada.
García Llaver explicó que la mayoría de las veces el cuadro no es grave, pero que el malestar que genera el rascarse puede alterar el sueño y la alimentación. De este modo, y con especial atención en los bebés, el mal descanso repercute en otras áreas de desarrollo. Por otra parte, el refregado puede generar lastimaduras o infecciones. “Mientras más chiquito es un bebé, más complicaciones puede tener la dermatitis”, destacó la dermatóloga.
Las zonas más afectadas del cuerpo varían según las edades. Así, en los bebés es común que aparezca en mejillas o cuellos mientras que en los niños algo más grandes las manchas se ven más en lugares de roce como brazos, piernas o sus pliegues y cola. “El lugar puede variar, pero lo que siempre existe es la picazón”, sostuvo García Llaver al mismo tiempo que agregó que la misma se intensifica en los horarios de dormir.
La importancia de la piel humectada
Los motivos de la dermatitis son variados y, por lo general, están asociados a factores alérgicos por perfumes, telas como lana y polar u otros. Incluso, el calor y la transpiración pueden provocar un aumento de las manchas o de la picazón.
Para aliviar los síntomas, la dermatóloga recomienda usar jabones lo más cercanos al PH de la piel que es de 5 puntos. Por este motivo, es importante leer las etiquetas de los mismos a la hora de comprarlos, si se poseen síntomas como los mencionados. En la farmacia se consiguen los sinde (“sin detergente”) mientras que también hay opciones comerciales como Dove que, al tener crema, contribuye a aliviar los síntomas.
Por otro lado,los baños deben ser cortos ya que el agua caliente reseca piel. Al respecto, García Llaver destacó la importancia de tener una piel humectada ya que la crema hidrata y hace barrera.
Así hay que poner crema todos los días y, en lo posible, que sea blanca y sin perfume. Del súper puede ser Dove o Nivea azul que son blancas y también hay intermedias como Bagovit, Urecrem y Perpiel. De manera más específicas, están las de laboratorio, diseñadas específicamente para pacientes atópicos.
Aunque muchas de esas cremas pueden ser costosas, hay que poner en una balanza lo que en el largo plazo se ahorra al utilizar un producto humectante: “La visita al médico y las noches sin dormir; entre otras cosas”, argumentó y subrayó la clave de convertir en hábito, desde pequeños, el cuidado de la piel.