Con la llegada del balance de fin de año, surge la reflexión sobre nuestro estado de salud y la intención de finalmente cumplir con completar el chequeo médico anual. Este proceso implica una evaluación exhaustiva de diversos aspectos de la salud, que van desde la toma de la presión arterial hasta la realización de exámenes complementarios como el screening de obesidad, controles ginecológicos, oftalmológicos y odontológicos, entre otras especialidades.
“Si hablamos solo de exámenes complementarios, en un adulto mayor de 18 años sano, deberíamos evaluar anualmente un laboratorio básico con determinación de glucemia y perfil lipídico. Sin embargo, además será necesario la toma de presión arterial y determinación del estado nutricional (screening de obesidad), así como también interrogar sobre consumo de sustancias como tabaco y alcohol” comenta la Dra. Nadia Avila, Especialista en Medicina Familiar de Boreal Salud (MP 6951).
Por otro lado, según antecedentes y otros factores como la edad y sexo, es necesario complementar con exámenes específicos para screening (detección precoz de enfermedades). “Es importante tener en cuenta que no porque pidamos más exámenes complementarios realizamos un mejor control o podemos prevenir más patologías. En ocasiones solicitar estudios innecesarios y en exceso nos puede llevar a tener falsos positivos, o sea exámenes que nos den anormales en pacientes que no tienen la patología o no la desarrollarán.” señaló la Dra. de Boreal Salud.
Más allá de los controles generales, existen otros estudios recomendados para cada edad:
Para mujeres:
Mamografías anuales a partir de los 40 años.
Densitometrías óseas para mujeres mayores de 65 años en casos específicos para detección precoz de osteoporosis y prevención de fracturas patológicas.
En hombres:
Determinación de Prueba del antígeno prostático específico (PSA) entre los 55 a 69 años como marcador de riesgo para cáncer de próstata.
Test de SOMF, importante tanto hombres como mujeres a partir de los 50 a 75 años para la detección precoz de cáncer de colon. En caso de presentar síntomas o antecedentes específicos deben realizar una videocolonoscopia baja cada 5 a 10 años.
Ante resultados anormales, las recomendaciones pueden variar según la naturaleza del hallazgo. Confirmar ciertos valores, como en el caso de diagnóstico de diabetes, o interpretar el perfil lipídico como un factor de riesgo cardiovascular, puede requerir tratamientos específicos, desde fármacos hasta modificaciones en el estilo de vida.
Hoy, los beneficios tanto para pacientes como para médicos al realizar chequeos anuales son significativos. Los pacientes obtienen un conocimiento profundo de su salud y la oportunidad de prevenir y retrasar enfermedades, mientras que, los médicos pueden realizar intervenciones preventivas, educar sobre estilos de vida saludables y detectar precozmente posibles problemas de salud. “La importancia de visitar al médico y prevenir enfermedades no puede subestimarse. El chequeo anual no solo brinda la oportunidad de evaluar el estado de salud actual, sino que también establece una base sólida para mantener una vida saludable y plena. En este cierre de año, priorizar la salud y bienestar es fundamental para concluir un año no solo con celebraciones, sino también con el compromiso de cuidarse a sí mismos” concluyen desde Boreal Salud.