El 31 de mayo es el Día Mundial Sin Tabaco y el lema de este año tiene que ver con la promoción de mayores cultivos de alimentos en lugar de tabaco. En un contexto de crisis alimentaria, la Organización Mundial de la Salud (OMS) apunta su campaña no solo a los daños que produce el cigarrillo en las personas sino también al papel que desempeña su producción en la ecología.
“Una crisis alimentaria mundial está creciendo, nutrida por los conflictos, el cambio climático, los impactos de la pandemia de COVID-19, así como los efectos dominó de la guerra en Ucrania que impulsan el aumento de los precios de los alimentos, el combustible y los fertilizantes”, informó la OMS.
Agregó que el cultivo y la producción de tabaco conducen a daños ecológicos globales a largo plazo así como desempeñan un papel crucial en la determinación del futuro de la agricultura y la seguridad alimentaria. De allí el lema de la campaña mundial 2023 para el Día Mundial Sin Tabaco centrado en el cultivo sostenible de alimentos en lugar de tabaco.
Primera causa de muerte prevenible
El tabaquismo es la primera causa de muerte prevenible en los países desarrollados, y también el motivo más importante de años de vida perdidos y/o vividos con discapacidad. En Argentina, se calcula que mueren 40 000 personas cada año por esta causa; según informó el Ministerio de Salud de la Nación.
Hay que recordar que el tabaco está directamente relacionado con la aparición de muchas enfermedades, fundamentalmente distintos tipos de cáncer (pulmón, laringe, faringe, riñón, hígado, vejiga, entre otros); enfermedades cardiovasculares (infartos, ACV, aneurismas); enfermedades respiratorias (bronquitis crónica y enfermedad pulmonar obstructiva crónica); e infecciones respiratorias reiteradas.
En la actualidad, una de las “salidas” de muchos fumadores ha pasado por los vapeadores denominados productos de tabaco calentado con un aparato eléctrico que calienta un cigarrillo especial conteniendo tabaco reconstituido a una temperatura que no llega a producir combustión.
Sin embargo, no es recomendable su utilización y nada tienen de saludables ya que hasta el momento no solo no se ha demostrado que sean inocuos para la salud sino que existen estudios que han comprobado la cantidad de sustancias tóxicas que poseen y que, incluso, pueden superar a los cigarrillos normales.
Pedir ayuda para dejar de fumar
Dejar de fumar no es sencillo y, aunque las experiencias son diversas, la principal recomendación es pedir ayuda en los diversos centros de salud o con su médico de confianza. De este modo, se podrá desarrollar un plan personalizado y adecuado para cada situación y posibilidades.
Se ha comprobado que quienes dejan de fumar obtienen beneficios casi inmediatos en su salud de carácter inmediato y a largo plazo. Después de 2-12 semanas mejora la circulación sanguínea y aumenta la función pulmonar. Entre 1-9 meses, se reduce la tos y la dificultad para respirar y en 1 año, el riesgo de cardiopatía coronaria es un 50% inferior al de una persona fumadora.
En tanto, luego de 5 años de dejar el tabaco, el riesgo de tener un accidente cerebrovascular disminuye. En 10 años, el riesgo de cáncer de pulmón y de otro tipo disminuye hasta ser el 50% del de una persona fumadora.
Fuentes: OMS y Ministerio Salud Nación