Alrededor de 80 millones de personas que viven en el mundo hoy han sufrido un accidente cerebrovascular y, en consecuencia, más de 50 millones de sobrevivientes viven con algún tipo de discapacidad permanente.
En Argentina es la tercera causa de muerte, después de la enfermedad coronaria y la gripe/neumonía.
Los datos publicados por la Federación Argentina de Cardiología (FAC) concluyen que, cada 9 minutos se produce un ACV y se producen 14 millones de ataques cerebrales en el mundo por año. Fallecen por esta enfermedad 5,5 millones de personas. Dos de cada 3 de ellos vivirán con alguna forma de discapacidad.
¿Qué es un accidente cerebrovascular?
Un accidente cerebrovascular o ataque cerebral sucede cuando se detiene el flujo sanguíneo a parte del cerebro. Al no poder recibir el oxígeno y nutrientes que necesitan, las células cerebrales comienzan a morir en minutos. Esto puede causar un daño severo al cerebro, discapacidad permanente e incluso la muerte.
¿Cuáles son los tipos de accidentes cerebrovasculares?
Hay dos tipos de ataques cerebrales:
El accidente cerebrovascular isquémico es causado por un coágulo de sangre que bloquea o tapa un vaso sanguíneo en el cerebro. Es el tipo más común, un 80% de los ataques cerebrales son isquémicos
El accidente cerebrovascular hemorrágico es causado por un vaso sanguíneo que se rompe y sangra en el cerebro
Otra afección similar a un ataque cerebral es el ataque isquémico transitorio. A veces, se le llama “mini derrame”. Sucede cuando la irrigación sanguínea al cerebro es bloqueada por poco tiempo. Si bien el daño a las células cerebrales no es permanente, lo coloca en mayor riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular.
Algunos factores aumentan su riesgo de tener un accidente cerebrovascular. Los mayores factores de riesgo incluyen:
Presión arterial alta: El principal factor de riesgo de los accidentes cerebrovasculares
Diabetes, enfermedades del corazón, fumar (el tabaquismo daña sus vasos sanguíneos y aumenta su presión arterial), la historia clínica o familiar de accidente cerebrovascular o ataque isquémico transitorio y la edad.
Otros factores de riesgo relacionados incluyen: no hacer suficiente ejercicio, colesterol alto, dieta poco saludable y tener obesidad
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas más comunes del accidente cerebrovascular son: la pérdida de fuerzas de brazo, piernas y/o cara, de forma súbita, generalmente unilateral, la confusión, dificultad para hablar o comprender lo que se dice; problemas visuales en uno o ambos ojos; dificultad para caminar. Otros menos frecuentes son: mareos, pérdida de equilibrio o coordinación; dolor de cabeza intenso de causa desconocida; y debilidad o pérdida de conciencia.
El 80% de los accidentes cerebrovasculares pueden prevenirse. ¿Cómo?
Controlar la hipertensión arterial
Dieta equilibrada y baja en grasas
No fumar
No ingerir alcohol en exceso
Su prevención es posible tanto para evitar la aparición de la enfermedad, controlando los factores que la predisponen (hipertensión arterial, diabetes, tabaquismo, hipercolesterolemia, consumo excesivo de alcohol, obesidad, sedentarismo y fibrilación auricular), así como reconociendo los síntomas precozmente lo que permitirá consultar a tiempo y prevenir sus secuelas.
Reconocer un ACV en el momento que ocurre es fundamental para poder acudir de inmediato a un centro médico donde el paciente pueda recibir el tratamiento adecuado a tiempo.