La celiaquía es una enfermedad sistémica autoinmune producida por la intolerancia permanente al gluten –conjunto de proteínas presentes en el trigo, la avena, la cebada, el centeno y en sus derivados-. La incorporación de gluten en la persona celíaca produce una lesión en el intestino delgado, que impide la normal absorción de nutrientes de los alimentos.
Como menciona la licenciada Priscila Navarrete, Jefa del servicio de Nutrición del Hospital Santa Isabel de Hungría (MP 1272), la enfermedad celíaca puede ser diagnosticada en cualquier momento de la vida, desde la infancia hasta en la adultez y es una enfermedad crónica, es decir, que si bien hasta la fecha no existe una cura, sí tiene tratamiento.
Los principales síntomas que pueden llevar a un diagnóstico de la enfermedad son los siguientes:
- Pérdida de peso
- Diarrea crónica
- Anemia
- Distensión abdominal
- Fatiga, jaquecas o mareos
- Retraso en el crecimiento
- Aparición de aftas bucales
- Caída de cabello
- Abortos espontáneos
- Otros
Cabe destacar que la enfermedad celíaca puede ser difícil de diagnosticar porque sus síntomas son similares a los de muchas otras enfermedades digestivas. Además, la licenciada resalta que, dependiendo de la sensibilidad individual, los síntomas pueden ser muy marcados o incluso estar ausentes. Es por esto que se debe consultar con un gastroenterólogo para poder realizar un correcto diagnóstico, el cual consta de un análisis de sangre y que luego se confirma mediante la realización de una biopsia en una endoscopía.
Tratamiento luego del diagnóstico
El único tratamiento posible para la Enfermedad Celíaca es consumir una dieta libre de gluten de por vida.
Una vez finalizado y confirmado el diagnóstico, es indispensable iniciar inmediatamente el tratamiento. Sin embargo, antes de comenzar la dieta, se debe realizar una consulta a un nutricionista, de manera tal de contar con toda la información necesaria para iniciar un plan de alimentación adecuado y no realizar transgresiones a la dieta de manera involuntaria.
¿Qué puede comer una persona celíaca y qué no?
Cabe destacar que, si bien existen alimentos que no poseen naturalmente gluten, sí pueden contenerlo como parte de los aditivos, conservantes, estabilizantes o espesantes agregados. Por lo tanto, para conocer correctamente cuáles son los alimentos aptos para las personas con celiaquía, se debe consultar el listado actualizado de alimentos libres de gluten aptos certificado por el A.N.M.A.T.
El Ministerio de Salud de la Nación provee un “Cuadernillo de orientación para celíacos” en el menciona cuáles son los alimentos que una persona con la enfermedad celíaca puede consumir y cuáles no puede:
- Cereales: granos de arroz y de maíz envasados; harinas de mandioca, de papa, de soja, y sus derivados envasados y de marcas permitidas, como así también premezclas elaboradas con harinas permitidas.
- Verduras y frutas: incluye todos los vegetales y frutas frescas o congeladas en su estado natural y aquellas envasadas que se encuentren dentro del listado de alimentos aptos para celíacos
- Leche líquida: de todas las marcas permitidas por el listado de alimentos aptos
- Leche en polvo, yogurt y quesos: aquellos incluidos en el listado de alimentos aptos para celíacos
- Carnes y huevos: todas. Con respecto a los fiambres y embutidos, se debe consumir sólo aquellos incluidos en el listado de alimentos aptos para celíacos
- Aceites y grasas: aceites, manteca y crema de leche de todas las marcas permitidas por el listado de alimentos aptos
- Maníes, almendras, nueces y semillas: elegir aquellas con cáscara y/o envasadas para evitar la contaminación cruzada con alimentos que contengan gluten
- Azúcar y miel pura: de todas las marcas permitidas por el listado de alimentos aptos
- Dulces: se deben consumir solamente dulces, amasados de pastelería, galletitas que se encuentren en el listado de alimentos aptos para celíacos
- Agua: es fundamental el consumo de aproximadamente 2 litros de agua potable a lo largo del día
- Condimentos: pueden contener gluten por eso se recomienda elegir hierbas frescas, pimienta en grano, azafrán en hebras o bien aquellos secos y envasados que se encuentren publicados en el listado de alimentos aptos.
Por otro lado, es importante recordar que, como destaca la licenciada Navarrete, no se deben comprar alimentos que se vendan a granel o sueltos ni aquellos que sean vendidos en la vía publica que no estén envasados, ya que no se conoce el origen de los alimentos y estos pueden estar expuestos a una contaminación cruzada.
Contaminación cruzada
Para las personas celíacas incluso unas migas de pan pueden ser perjudiciales para su salud. Por ello, es importante evitar que un alimento libre de gluten se contamine por entrar en contacto con otros alimentos que sí lo contengan. En una nota realizada por el Hospital Santa Isabel de Hungría, Priscila Navarrete nos cuenta cuáles son los cuidados que se deben tener para evitar una contaminación cruzada. Para leerla, clickeá acá.