El nuevo coronavirus genera cada día más preguntas: ¿Cómo me puedo infectar? ¿Vive el virus en algunos materiales? ¿Cuántas horas? ¿Vive en el aire? La Organización Mundial de la Salud, los Ministerios de Salud, personal de la salud y periodistas se esfuerzan por atender esas dudas y buscan las respuestas más sensatas para acercar a la comunidad. Sin embargo, con el correr de los días se hace inevitable que a las dudas resueltas se le agreguen muchas más.
En este caso, el equipo periodístico de Diario Salud intentó responder a una de ellas: ¿Cuál es el destino de los residuos generados por hospitales, laboratorios, farmacias y otros tantos efectores de salud y qué se hace luego con ellos? Para contestar esta pregunta, dialogamos con el ingeniero Martín Frontroth, Gerente de Operaciones de SUSTENTA (empresa prestadora de servicios de recolección, transporte, tratamiento y disposición de residuos patogénicos y farmacéuticos en toda la provincia de Mendoza).
Según el gestor, son la Ley de Residuos Patogénicos y Farmacéuticos y el Decreto de Residuos Patogénicos y Farmacéuticos de la provincia los que dan las primeras indicaciones de bioseguridad, acatadas obligatoriamente por cada organismo de salud. De acuerdo a las mismas, todos los residuos infecciosos y restos patológicos se almacenan directamente en bolsas de color rojo rotuladas, impermeables, resistentes al peso, con un espesor específico, que finalmente son introducidas en cajas. Seguidamente, tales residuos se acopian temporalmente en un depósito separado, del cual son retirados por los recolectores de la planta de tratamiento especial.
“Allí empieza nuestro trabajo. Recolectamos los residuos, los transportamos en vehículos habilitados de la empresa (por rutas preestablecidas) hasta la planta de tratamiento, en la localidad de Capdeville. Cuando llegan los camiones, nuestro personal recepciona, descarga y clasifica los residuos en palets (armazones de madera) para su posterior manejo. Se desinfectan los vehículos y, luego de la esterilización de las cajas, se vuelven a cargar estos rodados con contenedores repletos de esas cajas. Estas van directo hacia las empresas recicladoras para ser procesadas. El destino final de este proceso es la Fundación CONIN, con el fin de colaborar frente a sus objetivos de lucha contra la desnutrición infantil”, detalló Frontroth.
Por su parte, el ingeniero explicó que los residuos patogénicos y farmacéuticos son almacenados de manera transitoria en la planta, tratados por un sistema de autoclave (esto es, de reacción industrial de desinfección), gestionados para su tratamiento de destrucción controlada (se vuelven cenizas) y depositados en bolsas de tipo big-bag. “Estas se trasladan al box de cenizas, donde permanecerán hasta su retiro para tratamiento y/o disposición final a la planta de residuos, ubicada en el Borbollón, departamento de Las Heras. Es importante resaltar que los residuos son tratados a la máxima brevedad y que se cuida al medio ambiente y a los trabajadores de SUSTENTA con todos los recaudos necesarios. Cada año se realizan estudios de impacto ambiental y se capacita a nuestro personal”.
Sobre SUSTENTA
SUSTENTA es la empresa prestadora de servicios de recolección, transporte, tratamiento y disposición de residuos patogénicos y farmacéuticos en toda la provincia de Mendoza.
Aporta una solución total, definitiva y de última generación a la problemática de los desechos hospitalarios, y permite mejorar la calidad de vida de los mendocinos y ubicar a la provincia a la vanguardia en términos ambientales y de gestión de residuos, a nivel de los países más desarrollados del mundo.
Se encarga de los residuos patogénicos y farmacéuticos provenientes de los lugares de atención de salud humana y animal de Mendoza.
Trabaja con 16,4 toneladas de residuos por día, cubriendo ampliamente la cantidad que ocupan hoy los efectores de todo el territorio poblacional.