El ejercicio físico es una actividad muy buena para la salud. Varios profesionales lo recomiendan por sus virtudes de prevención y control de enfermedades. A nivel cardiovascular, por ejemplo, tiene muchos beneficios, como el acondicionamiento físico; el quemado de grasas que se convierte en energía; la liberación de adrenalina; su virtud de funcionar como un antidepresivo natural; ayuda a sobrellevar la abstinencia tabáquica; etcétera.

Sin embargo, en algunas circunstancias, realizar actividad física puede conllevar a algunos riesgos. Para poder prevenirlos y hacer ejercicio de manera adecuada, la doctora Paola Mostafá Coll, médica cardióloga en Penta Medicina Cardiovascular (Mat. 11947), dio algunas recomendaciones:

• No hacer ejercicio físico excesivo;
• No exponerse al calor ni al sol para realizar la actividad;
• Hidratarse bien;
• Si es mayor de edad o sufre de alguna patología como hipertensión, hipertrofia, o ha sido intervenido en una cirugía de bypass, debe hacer ejercicio a la sombra y no debe ser intenso;
• Realizar actividad física a partir de las 18.30 hs;
• Destinar 30 minutos para una posterior elongación, tiempo de recuperación cardiovascular y muscular;
• Comer de manera liviana, introduciendo frutas y verduras y sacando la mayor cantidad de grasas posibles e hidratos de carbono;
• Utilizar ropa cómoda;
• Consultar con un especialista en caso de ser necesario.

Respecto a la taquicardia luego de hacer actividad física, la doctora explicó que es normal siempre que esta baje a medida que pasa el tiempo. Sin embargo, si la persona presenta falta de aire excesiva, debería visitar al médico.

Beneficios del ejercicio

Si la actividad física se realiza en los horarios y las condiciones pertinentes, presenta (además de las bondades mencionadas al principio) los siguientes beneficios, de acuerdo al sitio Medline Plus:

• Quema calorías. Esto puede ayudarle a perder libras (kilos) extra o permanecer en un peso saludable. Tener sobrepeso es un factor de riesgo mayor para la enfermedad cardíaca.
• Disminuye la presión arterial. Hacer algún tipo de ejercicio aeróbico moderado, durante 30 a 60 minutos casi todos los días de la semana, puede ayudar a bajar la presión arterial. La hipertensión arterial es otro importante factor de riesgo para la enfermedad cardíaca.
• Reduce el estrés. El ejercicio regular es un eliminador del estrés comprobado. Los expertos no están seguros si el estrés desempeña un papel directo en la enfermedad del corazón. Pero puede contribuir a otros factores de riesgo.
• Reduce el colesterol. El ejercicio puede disminuir el LDL (nivel de colesterol “malo”). Un nivel alto de LDL es un factor de riesgo importante para la enfermedad del corazón.

Además, según la Dra. Julieta Nerviani (también del staff médico de Penta Medicina Cardiovascular, Mat. 10461), el entrenamiento físico tiene efectos buenos sobre la diabetes, la dislipemia y la salud psicosocial.