Los casos de nacimientos antes de término se producen cotidianamente alrededor del mundo. En su mayoría, ocurren de forma espontánea y deben ser atendidos de manera rápida para evitar problemas de salud. Entre los mismos se encuentran los problemas respiratorios; dificultades para alimentarse; parálisis cerebral; atraso del desarrollo; problemas de visión y de audición. Y aunque existen algunos factores que podrían ser indicativos de un nacimiento prematuro, un nacimiento antes de término no se puede prevenir.
Lorian Párraga, jefa del servicio de Neonatología del Hospital Santa Isabel de Hungría (Mat. 11.516), explicó en ese sentido que “el riesgo de prematurez siempre existe, más aún si la madre tiene una patología de base o si su anterior embarazo ya fue prematuro; si va a tener gemelos o realizó una fertilización in vitro. Por ello, se aconseja durante el embarazo en curso hacer reposo y programar el parto o cesárea en un lugar adecuado, como en una neonatología de complejidad”.
De acuerdo a la doctora, ha habido un avance en el cuidado al neonato que tiene que ver con la separación del lugar en que opera el propio obstetra del lugar que puede elegir la mamá para llevar adelante su parto (por considerarlo más completo, por ejemplo). De esta manera, las vidas del bebé y de la mamá corren menos peligro: “Todo prematuro y embarazos de alto riesgo deben nacer en la categoría de hospital que le corresponde. En el caso del hospital Santa Isabel este calificó como 3b, lo que significa que estamos capacitados para recibir los cuadros más complejos: desde prematuros extremos a hipoplasias; atresias; cuadros neuroquirúrgicos; etcétera”.
Así mismo, la especialista señaló que los controles durante la gestación son un procedimiento muy importante, ya que es desde ellos que se puede comenzar a cuidar al bebé y a la mamá con consejos y tratamientos: “Los embarazos con patologías maternas como diabetes; híper e hipotiroidismo; artritis; colestasis; afectan al recién nacido. Incluso el grupo sanguíneo y factor son datos que los neonatólogos debemos saber para realizar el correcto manejo del bebé (ya sea que entre a terapia o no)”.
Seguidamente, la neonatóloga habló sobre el cuidado del niño una vez nacido, en donde manifestó que la atención se torna más personalizada por los problemas que presenta cada pequeño. Así, aseguró que tal cuidado demanda de muchas especialidades para lograr que el bebé crezca a término lo antes posible, tales como enfermería de alta calidad; neonatólogos; pediatras; etc.
La importancia de la lactancia en el desarrollo del prematuro
Como uno de los principales componentes para el crecimiento de los niños pre-término, la doctora y los especialistas en general mencionan a la lactancia materna, porque ella aporta las cantidades adecuadas de carbohidratos, proteínas y grasa; las proteínas digestivas, minerales, vitaminas y hormonas que los bebés necesitan y los anticuerpos que ayudan a evitar que el bebé se enferme. En algunos casos, de acuerdo a Párraga, la leche materna puede complementarse con micronutrientes y agregados para acelerar el correcto crecimiento de los bebés.
El rol de enfermeros y padres para el crecimiento del niño pre-término
Otro factor fundamental en el desarrollo del prematuro referido por la neonatóloga se encuentra en la asistencia de padres y enfermeros, donde es competencia de los segundos el cuidado del desarrollo del neonato y, de los primeros, el establecimiento del vínculo y la atención continuada una vez que el niño tenga el alta.
“En un principio la leche materna y sus complementos son administrados por enfermería, pero una vez que el prematuro se encuentra estable pasa a la unidad de cuidados especiales, en donde se les enseña a los padres cómo realizar toda medicación o intervención que su niño requiera. Afortunadamente, en el hospital tenemos una unidad de cuidados especiales, por lo que se aprovecha de enseñarles todo y despejar cualquier duda. Lo importante de esta unidad es descomplejizar, crear vínculo y sobre todo disminuir los estímulos de la terapia”, detalló la profesional.
Finalmente, la doctora especificó que, una vez brindado el alta, los niños nacidos pre-término deben continuar por 3 distintos consultorios:
- Seguimiento de alto riesgo: este abarca pacientes de término que sufrieron patologías de alto riesgo;
- Seguimiento del prematuro: este va desde que se van de alta hasta que el médico considere su alta, incluso hasta los 14 años;
- Consultorio de neonatología: hasta los 30 días de vida.