Hasta hace pocos años se pensaba que la enfermedad cardiovascular era propia del hombre. Se creía que la mujer moría principalmente por enfermedades ginecológicas (cáncer de mama, útero) y se pasaba inadvertido (hasta un estadío tardío) que algún síntoma proviniera de un problema en el corazón. Sin embargo, fue con el cambio en el estilo de vida de las mujeres que algunos médicos comenzaron a prestar atención a los problemas de sus corazones.
Las enfermedades no infecciosas (como la diabetes, la obesidad, el sedentarismo, la depresión, el colesterol) se convirtieron en los problemas más sufridos por las mujeres, entre otros propios de la edad, los cuales explican la mayor vulnerabilidad de las mujeres: el producto de alguno o varios de los componentes se tradujo en infartos de miocardio y en accidentes cerebrovasculares.
La realidad reveló que en Argentina una de cada 3 mujeres muere a causa de una enfermedad en las arterias coronarias, lo que representa un deceso cada 11 minutos.
Frente a la posibilidad de prevención y de cuidados tempranos ante la enfermedad cardiovascular y con la idea de disminuir esta cifra, la Federación Argentina de Cardiología (FAC) y la campaña Mujeres en Rojo lleva adelante una campaña para que el proyecto en Senadores se haga ley.
Sobre el tema, Diario Salud dialogó con una de las integrantes de la FAC y médica cardióloga de Penta Salud, Silvia Nanfara (Mat. 4493), quien contó: “El objetivo de la campaña es tomar conciencia de que los problemas cardiovasculares son la principal causa tanto de enfermedad como de muerte en las mujeres, que se pueden prevenir con hábitos de vida saludables y controlando los factores de riesgo. Nadie puede defenderse de lo que no conoce. Por ello, del 26 de agosto y hasta el 29 de septiembre se ha puesto en marcha una campaña de prevención con la que vamos a tratar de aparecer en todos los lugares posibles. Además, se están recolectando firmas para que se apruebe el proyecto. Y, desde mañana, se pondrán en marcha charlas y actividades al aire libre en varias provincias del país, según anunció la Federación Argentina de Cardiología”.
De acuerdo a la especialista, las esperanzas de una sanción están vigentes, aunque todos los años se piensa en una acción para instalar cada vez más la conciencia en la población: “Desde hace muchos años en Argentina y el mundo se trabaja en campañas de concientización. La Federación Argentina de Cardiología a través del Comité de Prevención Cardiovascular en la Mujer, de sus Sociedades Federadas, y de redes sociales trabaja todo el año en este tema. De hecho en Mendoza, la Sociedad de Cardiología de Mendoza junto con el comité lleva organizados de manera consecutiva 11 Simposios Cuyanos de Prevención Cardiovascular en la mujer, el último realizado los días 1 y 2 de agosto de este año”.
La importancia de la concientización, según la doctora, gira en torno a que muchos de los factores que desencadenan en riesgo cardiovascular se pueden prevenir: “Si bien hay factores como la edad, la genética individual y los antecedentes familiares de enfermedad cardiovascular, que no pueden modificarse, hay otros sobre los que sí se puede trabajar, como abandono del tabaquismo; mantener una dieta con bajo contenido de sal, baja en grasas saturadas y con poco consumo de alcohol y realizar ejercicio o caminar 30 minutos por día para mejorar el peso, evitar la obesidad y controlar factores de riesgo como la hipertensión arterial y el exceso de colesterol malo y triglicéridos. En el caso de padecer hipertensión arterial; diabetes; aumento de colesterol, se deben realizar las consultas necesarias y hacer el tratamiento indicado, tanto higiénico-dietético como farmacológico”.
Sintomatología
Los síntomas que presenta una mujer cuando sufre un problema en el corazón son tan variados que aún hoy ambulancias, médicos y hospitales no suponen que la fémina podría estar padeciendo una enfermedad coronaria. “Ni la misma mujer lo advierte”, aseguró Nanfara. Según advirtió la profesional, entre el síntoma, el estudio, el diagnóstico y el tratamiento pasa un tiempo fundamental para salvar la vida de esa mujer. “Es una cadena que lleva a que exista una mortalidad tan alta”, explicó.
Y finalizó detallando posibles signos:
- Dolor de pecho;
- Fatiga;
- falta de aire;
- dolor abdominal;
- ansiedad;
- dolor de mandíbulas y miembros superiores, entre otros.