El sol es fuente de vida. Permite que el cuerpo produzca la vitamina D necesaria para los huesos y el calcio. Sin embargo, exponerse de forma excesiva e inadecuada puede generar envejecimiento, cánceres, alergias y hasta disminuir las defensas. María Fernanda Flores, dermatóloga en el Hospital Santa Isabel de Hungría, advirtió en ese sentido sobre la peligrosidad de los rayos UV, principalmente los UVA y los UVB, y brindó algunas herramientas para evitar dañarse.
“Los UVA son los rayos que nos producen básicamente arrugas y son constantes durante todo el año sin importar la estación. Son los emitidos por las camas solares y podrían tener alguna relación con el desarrollo de Melanomas. Mientras que los UVB son los que nos producen quemaduras, están en mayor concentración desde los meses de setiembre a abril, siendo mayor en los meses de verano. Este tipo de radiación es responsable de los dos cánceres de piel más frecuentes (Basocelular y Espinocelular). La mejor manera de evitar los daños provocados por el sol es evitándolo y usando fotoprotectores tanto físicos (anteojos, gorras, ropa especifica) como químicos, que serían los protectores solares”, explicó la doctora.
Según la especialista, las cremas solares indicadas para protección UV deben cumplir con algunas condiciones:
- Ser de amplio espectro (UVB y UVA);
- Resistentes al agua;
- En niños ser de filtro físico;
- Libre de parabenos;
- Con antioxidantes.
Sobre la cantidad indicada de fotoprotección, la dermatóloga detalló que se deben colocar 2 miligramos por centímetro cúbico de piel, lo que equivale a la medida de 9 cucharadas de té para todo el cuerpo. Además, manifestó que el procedimiento debe realizarse cada dos horas y siempre con una aplicación previa de 30 minutos a la exposición. “Si se está por más de 30 minutos sumergido en el agua, debe volverse a renovar. Es importante no olvidar pies, orejas y nuca”, manifestó.
En cuanto al número de FPS (Factor de Protección Solar), especificó cuáles son los números con más y menos protección: En escala, un FPS con entre 2 y 12 puntos protege mínimamente la piel; uno de entre 12 a 30 defiende moderadamente la piel y un FPS mayor a 30 puntos presenta una protección alta.
Hábitos saludables a la hora de exponerse al sol
Finalmente, en torno a la rutina que se debe seguir para el cuidado de la piel, Flores resumió 7 puntos centrales:
- Usar protector solar todo el año
- Evitar la exposición solar entre las 12 y las 16 hs
- Evitar la exposición solar de niños menores de 2 años
- Evitar las quemaduras solares, principalmente en niños menores de 11 años
- Usar medios físicos de protección solar ( gorros, anteojos, sombrillas)
- Chequear tus lunares (autoexamen) en forma periódica
- Visitar a tu dermatólogo una vez al año