La efectividad del cigarrillo electrónico siempre estuvo en duda. Los especialistas, investigadores y hasta los propios fumadores lo ponían en cuestión. Y aunque se presentaba como un producto con todas las bondades, distintas investigaciones demostraron que su consumo es perjudicial para la salud.
Según una publicación realizada por el Ministerio de Salud de la provincia, este cigarrillo posee en su vapor sustancias tóxicas no declaradas, ni avaladas por la ANMAT. Su venta es ilegal, aunque son varios los lugares que lo comercializan.
Javier Abal, miembro de la Unidad de Prevención y Cesación Tabáquica de OSEP, habló con Diario Salud sobre los peligros del mismo y contó alternativas para poder salir de la adicción. Conforme al neumonólogo, “el cigarrillo electrónico genera un vapor que es dañino para el pulmón, puede provocar EPOC y tiene sustancias tóxicas que pueden producir cáncer. A su vez, administra la nicotina de manera muy rápida, lo que genera adicción, porque la vía inhalada es la que llega más rápido al cerebro. Y también es perjudicial para terceros”.
Según el especialista, fumar cigarrillo electrónico es como ponerse un petardo en la boca, ya que, si la batería falla, puede explotar y generar graves quemaduras. Sin embargo, su consumo es cada vez más habitual, ya que el pitillo de papel está migrando al formato eléctrico: “Por las restricciones que tiene el cigarrillo común, esta es la estrategia de los grandes tabaqueros para seguir en el mercado”, explicó.
Abal habló entonces de una herramienta para combatirlos, la prevención, y se refirió a dos programas que buscan suprimir el consumo de tabaco: el programa propio de OSEP, conformado en la Unidad de Prevención y Cesación Tabáquica, y el Programa Provincial de Control de Tabaco, que se aplica en el Hospital Central y en varios hospitales públicos de la provincia.
“El tratamiento de cesación que da OSEP consiste en un año de tratamiento, en el cual el fumador es tratado tres meses con fármacos y todo el tiempo con un apoyo cognitivo-conductual ajustado a cada persona. Reciben una primera charla, que es un taller de inicio y luego siguen en una consulta individual con los médicos para cesación. Es para socios y pueden sacar turno comunicándose al 0810-810-1033, opción 7. Para quienes no son socios, pueden llamar al 0800 del Ministerio (0800-999-3040) o acercarse al programa que se desarrolla en distintos hospitales públicos de Mendoza”.
Es importante destacar que existen otras opciones para los fumadores que sienten que no necesitan adherir a un programa, como el libro de autoayuda que brinda el Ministerio de salud http://www.msal.gob.ar/tabaco/index.php/informacion-para-ciudadanos/como-dejar-de-fumar/manuales-de-autoayuda o la propia voluntad.