Ya son cinco niños y un hombre que han muerto, en el país, como consecuencia de los efectos del estreptococo pyogenes, una bacteria vinculada a la faringitis y a las anginas, cuya presencia es muy común durante el invierno pero que este año adquirió una virulencia que sorprendió a la comunidad científica.
Los seis casos fatales generaron una alerta sanitaria. No se trata de una epidemia, pero preocupa que la bacteria se haya desarrollado con un perfil tan virulento en pacientes de distintas zonas que no tuvieron contacto entre sí.
DIARIO SALUD profundizó sobre el tema, hablando con médicos del área infectología del Notti en Mendoza. La base de los testimonios médicos es llevar calma a la gente ya que no se está ante una epidemia, sino ante casos que se han complicado al haber otro virus preexistente.
Los casos de mayor gravedad se producen cuando se presenta la forma invasiva del Streptococcus Pyogenes, que es cuando la bacteria ingresa al torrente sanguíneo y libera una toxina. Según los especialista, esto ocurre en menos de 1% de los casos.
Cómo prevenir infecciones severas por la bacteria
Liliana Lima, médica infectóloga de los hospitales Notti y Schestakow, explicó a DIARIO SALUD que lo que ocurre es que el estreptococo «infrecuentemente se presenta de esta manera, con infecciones severas y potencialmente mortal. El germen no es nuevo, no ha mutado y es conocido por todos los pediatras. De hecho, es uno de los pocos que sigue siendo sensible a la penicilina», explicó inicialmente la especialista.
Lo que ocurre es que el estreptococo tiene mecanismos de acción -como la liberación de toxinas- que puede degenerar en infecciones severas. «Las infecciones que puede causar el estreptococo son impetigo (infecciones en la piel, costras); le sigue la angina estreptocócica (llamada angina bacteriana), la escarlatina. Las infecciones severas por estreptococo pueden afectar músculos, facias, llegando al shock séptico».
Si la bacteria llega al punto de producir shock séptico con fallo multiorgánico o fascitis necrotizante, es cuando destruye músculos y tejido subcutáneo y puede llevar a una amputación e incluso la muerte. Por eso se la conoce como la bacteria asesina.
La Dra. Lima explica que la mejor prevención es que, ante cuadros de anginas o faringitis en niños o adultos con alta fiebre, se concurra de inmediato al médico. «El potencial que unas anginas pasen a infección severa es bajo -explica-. La presencia en anginas del estreptococo se visualiza como una amígdala roja dolorosa, con manchas blancas, con ganglios inflamados, fiebre y puede estar acompañada de vómitos y dolor abdominal».
Los casos mortales en Buenos Aires y otras provincias se dieron porque la bacteria se presentó asociada a otra enfermedad, como fue el caso del virus de la Gripe A.
Ante esto, la médica infectóloga del Notti indica que la principal prevención es mantener al día el calendario vacunatorio en bebés y niños. «Es importante la prevención de varicela mediante la vacunación, al igual que ocurre con la gripe. Hay una asociación entre sepsis severa y la varicela. Los chicos que están cursando varicela o han tenido la enfermedad en el último mes tienen mayor riesgo de hacer sepsis por el estreptococo», indica.
«La gente está acostumbrada a que la varicela es una enfermedad poco importante, pero en realidad tiene 100% de contagio. Hay que tomar la precaución de vacunar a los niños apenas se dé un caso en el entorno ya que, de darse entre hermanos por ejemplo, el virus se va haciendo más fuerte y adquiriendo gravedad. El último niño en infectarse tiene más posibilidad de hacer infección severa, que fue un caso que se dio en el hospital Schestakow», añadió.
Recordamos, en este sentido, que para prevenir la VARICELA los niños nacidos en el 2013 en adelante han sido vacunados a los 15 meses. Para el resto de los niños lo ideal son dos dosis aunque, según la infectóloga, con una dosis ya se impide las formas severas de la enfermedad.
10 días de antibióticos, sí o sí
La Dra. Liliana Lima fue la encargada de llevar calma a la población ante las consultas por los casos mortales causados por el Streptococcus Pyogenes. «No hay que automedicarse, esto es común entre los adultos que toman un antibiótico y lo dejan a los pocos días», indica.
«Ante los síntomas de anginas en adultos y en niños hay que realizar un cultivo de fauces para ver si hay estreptococo. Si es así, el tratamiento completo son 10 días de penicilina a rajatabla, una para terminar con infección local y otra porque el germen puede asociarse a otras enfermedades crónicas, como la fiebre reumática, que puede llevarlo a hacer infección severa», explica la especialista.
La fiebre, el síntoma a tener en cuenta
La Dra. Lima indica que el primer síntoma a tener en cuenta es la fiebre alta. «Los padres son quienes deben manejar la fiebre, y bajarla antes de llevar al niño a la consulta. No nos sirve de nada ver a un niño con fiebre alta en la guardia, a un médico no se le va a escapar un cuadro severo. Y hoy, en guardias de hospitales abarrotadas de niños, puede haber uno que esté realmente grave», explica.
La base es que los padres presten atención al cuadro que presenta el niño. Ante fiebre alta llevarlo al pediatra, y en caso de síntomas graves llevarlo a la guardia de un hospital.
«No hay un brote, la bacteria no ha mutado, es la misma bacteria que conocemos los médicos desde siempre. Un cuadro severo no se le va a escapar a los médicos», subrayó finalmente. Y explicó que no hay un alerta epidemiológico porque estamos en la época del año en que estos casos se dan normalmente.