En el marco de la última jornada del 36º Congreso Nacional de Cardiología se abordaron varias temáticas que pusieron fin al simposio. Hipertensión arterial; cardiopatías en la mujer; entre otros temas, fueron debatidos por especialistas del país y del mundo. Y uno de ellos fue encarado con mucha preocupación: el riesgo de la mujer embarazada con hipertensión.
Nieves Martel, doctora Ex presidenta de la Sociedad Española de Hipertensión; profesora de la Universidad Complutense y Jefa de sección de la Unidad de Hipertensión y Riesgo Vascular del Hospital Clínico San Carlos (España), disertó al respecto y esto fue lo que contó: “Primero hay que saber que existen dos tipos de hipertensión en el embarazo: la crónica, que ya tenía la paciente antes de quedar embarazada, y aquella que se adquiere como consecuencia del embarazo. Esta última sucede porque habitualmente hay un problema de la implantación con la placenta que produce problemas de hipertensión arterial en la gestación. Y aquí hay muchas consecuencias tanto para el feto como para la madre. A nivel general, hay que hacer un seguimiento muy cercano a estas pacientes que incluye muchos tratamientos hipertensivos durante el embarazo”.
Según la especialista española, lo más importante para prevenir cualquier riesgo es conocer, antes de quedar embarazada, los niveles de tensión arterial y de glucemia: “Hay que saber en todo momento cuáles son nuestras cifras, ya que la glucemia y la hipertensión son los factores que más influyen en la preeclampsia. La preeclampsia lleva a unos niveles de mortalidad infantil muy altos, pero también maternos. Es decir que una se puede morir por una complicación en el embarazo debida a la hipertensión arterial. Si se lleva siempre un conocimiento de los niveles de tensión arterial y de glucemia, el profesional podrá manejar con mayor precisión a la embarazada”.
Además de llevar el control comentado por Martel, el cuidado en la alimentación durante el embarazo fue el segundo punto al que la doctora se refirió: “Lo fundamental de estas dietas, además de la calidad, es que la paciente no engorde más de 1 kilo durante la gestación. Es responsabilidad del obstetra y del cardiólogo acompañar a la embarazada y solicitar una dieta adecuada tanto para su cuidado como para el del feto”.
En cuanto al tratamiento de la hipertensión en la mujer embarazada, la profesional manifestó que puede realizarse con pastillas, ya que hay medicamentos adecuados que son inofensivos tanto para el feto como para la madre: “Habitualmente se pone una medicación adecuada, una medicación que esté permitida para el embarazo y siguen medicándose. Otras veces se hace una especie de ‘luna de miel’ y se puede quitar la medicación al principio del embarazo. Pero lo normal es que una paciente hipertensa crónica tenga que seguir con el tratamiento durante el embarazo”.
Para concluir, compartimos las sugerencias de la American Pregnancy Association para las mujeres embarazadas con hipertensión:
- Use poca o nula sal en las comidas;
- Beba de 6 a 8 vasos por día;
- No coma muchos alimentos fritos o comida chatarra;
- Descanse;
- Haga ejercicio habitualmente;
- Eleve sus pies varias veces al día;
- Evite el consumo de alcohol;
- Evite las bebidas que contengan cafeína;
- Su médico puede sugerir que tome medicamentos prescritos y suplementos.