Un estudio publicado en The American Journal of Clinical Nutrition reveló que la ingesta de antioxidantes ayuda a reducir casi un 15% el riesgo de sufrir disfunción eréctil. En ella intervienen múltiples factores, poniendo cada vez más el acento en la relación de este problema con otros elementos de riesgo cardiovascular.
Una idea que ahora refuerza un nuevo estudio internacional es que el consumo de antioxidantes naturales (presentes en frutas, verduras o vino) posibilita una reducción del 10% en el riesgo de sufrir impotencia.
Un grupo de investigadores británicos y americanos evaluó durante 10 años a más de 50.000 varones, consultándoles sus problemas para tener una erección. Los científicos desarrollaron detallados cuestionarios sobre el nivel de flavonoides antioxidantes incluidos en su dieta, indagando sobre todo, a través de la ingesta de alimentos como los frutos rojos, cítricos, té verde o vino.
En el grupo de varones que más antioxidantes consumían se observó una reducción del riesgo de desarrollar disfunción eréctil del 14%, aunque cuando estas sustancias se asociaban, además, con ejercicio físico, el beneficio podía alcanzar incluso el 21%. El mayor beneficio derivado de los flavonoides se halló en hombres menores de 70 años.
Beneficios saludables
Ya se sabía que el consumo de ciertos alimentos ricos en flavonoides reduce el riesgo de problemas cardiovasculares o diabetes. Pero es la primera vez que se asocia con una reducción de la difunción eréctil, un problema que afecta -según distintas estadísticas- a entre el 33% y el 52% de la población masculina.
De todos los tipos de flavonoides analizados, los que mayores beneficios aportaron en el estudio fueron las antocianinas, las flavononas y los flavones, presentes sobre todo en fresas, arándanos, manzanas, vino tinto, peras y cítricos. Los autores comparan el efecto que se logró con sólo unas pocas raciones semanales de estos alimentos al equivalente a caminar entre 2 y 5 horas semanales a buen ritmo.
Las cifras que manejan los investigadores alertan de que antes del año 2025 más de 322 millones de hombres en todo el mundo tendrán un problema de disfunción eréctil
El investigador Eric Rimm afirmó que el consumo de este tipo de sustancias además de beneficiar a la salud sexual, brinda otros beneficios saludables. “La impotencia es a menudo un indicador de otros problemas vasculares, y su detección ofrece una oportunidad única para intervenir y prevenir problemas cardiovasculares, infartos de miocardio e incluso fallecimientos”.
Por eso, destaca que los varones con problemas de erección que comiencen a hacer elecciones saludables (como una dieta rica en antioxidantes y ejercicio físico) no sólo lo van a notar en la cama, sino que estarán protegiendo además su corazón.